
Phoenix
José Cuervo Salón
2/febrero/2010
Texto e imagen por: Mentora
Dos fechas sold out en menos de una hora [Ciudad de México], boletos en reventa al doble del precio oficial, lluvia durante la espera y un público totalmente entregado, fue la calurosa bienvenida que México le dio a Phoenix, en la primera presentación de su mini gira por nuestro país.
Muchos de los que estábamos ahí soportamos tránsito, lluvia y una fila, que a pesar de ser muy larga, nos accesó rápidamente al José Cuervo Salón, que si bien, es conocido por su pésima —por no decir nula— acústica, fue el lugar elegido para escuchar gran parte de uno de los materiales discográficos más destacados del año que acaba de concluir.
No importó nada de lo anteriormente mencionado, la lluvia no paró, los automóviles estacionados causaron caos y la gente estalló al llegar el momento en el que el peculiar inicio de ‘Lisztomania’ llamó a todos a dejar las filas de las bebidas y concentrarse al centro. ‘Long distance call’ fue un recordatorio de porqué todos estábamos ahí, de porqué no nos importaba estar a media noche cantando.
‘Rally’ fue una muy grata sorpresa que nos introdujo, de manera inesperada, a la sencillez de ‘Fences’ y al aparente minimalismo de ‘Girlfriend’. El misterio de ‘Armistice’ nos llevó de la mano al momento experimental de la banda: ‘Love like a sunset’, un reposo en el momento en el que la energía estaba en su punto para comenzar con el repertorio de verdaderos éxitos.
‘Napoleón says’ fue totalmente opacada por ‘Consolation prizes’, que a muchos nos hizo regresar al 2006, en el que si bien la trayectoria de la banda constaba de tres discos, no les permitía dominar al público de la manera que ahora pueden hacerlo.
Y cuando parecía que el público estaba en la bolsa de Mars y compañía, llegó el encore que a muchos nos hizo llorar con ‘Everything is everything’ en acústico y el cover de ‘Playground love’, que a pesar de haberlo escuchado hace casi cuatro años, jamás dejará de enamorarnos y esperanzarnos con que Air vendrá.
Aplausos, gritos y el unísono en los coros de ‘Too young’, fueron poco, comparados con ‘If I ever feel better’ en donde no hubo quien no se sintiera parte de los acordes, del momento y del hecho de comprobar que esa banda, nuestra banda, había crecido y que tenía la capacidad de llevarnos —ida y regreso— del momento más dulce al más frenético, lo cual sucedió al final con ‘1901’.
Muchos presumen que han llegado al escenario con Girl Talk, pocos que estuvieron en lo que obviamente será, uno de los mejores cierres del año con gran parte del público en el escenario, mientras muchos otros perseguían a Thomas Mars, quien decidió bajar a agradecer la energía de la noche, la primera de las tres que restan de su estancia en México, un país de buena memoria musical y público caluroso.
Setlist
Lisztomania
Long distance call
Lasso
Rally
Run run run
Fences
Girlfriend
Armistice
Love like a sunset
Napoleón says
Consolation prizes
Rome
Funky square dance
Encore
Everything is everything
Playground love (Air cover)
Too young
If I ever feel better
1901